La actividad deportivo automovilística prácticamente no descansa. Termina diciembre, pasan las fiestas el brindis, el encuentro y rápidamente a preparase porque se corre la carrera más dura del mundo, el desafío mayor, esa prueba de resistencia que mide el valor, el sacrificio y que hace ya nueve años visita a Sudamérica. El Rally Dakar es aquella aventura que Thierry Sabine soñó, y mantiene en vilo al mundo deportivo ya que es prácticamente la única actividad importante en esos días. El Dakar es aventura, es desafío, donde entra en juego diversos factores, el físico y el psicológico para los que enfrentan la prueba...nada es fácil, nada viene de arriba. Para entender la carrera basta con entender que es diferente a todas, que tiene un espíritu especial y que se encuadra en una atmósfera única, particular, solidaria, difícil.
El Dakar es distinto a todo, y si bien en todas las categorías están aquellos que salen a buscar la punta y cuentan con enormes presupuestos y apoyos de fabrica para buscar la victoria, ya que ganar el Dakar significa tener el auto,la moto, el camión más duro y más resistente. Pero también están los más sacrificados, los que con menor presupuesto buscan terminar, los que se enfrentan a los problemas del recorrido las variedades geográficas climáticas y los propios problemas que deben enfrentar. Prueba de ello es el famoso Iritrack, ese dispositivo que la organización le entrega a los participantes, que cuenta con cuatro botones, los dos primeros de color amarillo, que la pone en funcionamiento; el verde, que utilizan los pilotos para avisar que están detenidos pero sin problema existente, y el rojo, el que prueba el coraje y la resistencia, ya que es la alarma que activa el competidor en casos extremos y que involucra daño físico o mecánico irreparable. Apretar el botón rojo significa pedir ayuda y la organización acude de inmediato aunque también significa que estas fuera de carrera, la lucha contra las adversidades, los golpes, los dolores juegan un papel psicológico muy importante para poder evitar, dar todo de cada uno, y extender hasta el último todas las chances antes de apretar ese maldito botón rojo...así es el Dakar.
La prueba se disputó por primer vez en 1979 y se llevó a cabo sin interrupciones hasta el año 2007, ultima vez que la prueba visitó el desierto africano. Al año siguiente con todo listo para salir a la aventura una amenaza del movimiento de resistencia islámica Al Qaeda motivó la cancelación de la prueba, motivos por el cual Sudamérica se instalaba como la mejor alternativa, convirtiéndose en anfitrión de la competencia hasta la actualidad.
Ya hace nueve años que la prueba visita el hemisferio sur, disputándose en Argentina, Bolivia y en los ausentes en este año, Peru y Chile.
La edición 2017 suma a Paraguay que abrirá el juego, disputará el primer día de competencia, para luego volver al suelo argentino, continuar por territorio boliviano hasta su capital La Paz donde se realizará la jornada de descanso, para volver a las pampas y terminar en Buenos Aires. un terreno difícil, pedregoso, con gran altitud sobre el nivel del mar, aunque sin la cantidad de arena que su historial en África simbolizaron por décadas a la prueba. Se espera que el próximo año se sume Peru y Chile para que de esa manera el desierto de Atacama vuelva a ser el principal protagonista de la carrera, y de esa manera volver a tener mayor presencia de dunas. Al menos el gobierno de Peru ya confirmó su intención de tener parte de la carrera el próximo año.
Motos: Price quiere repetir
Fue la revelación el año pasado. El australiano Toby Price y su Ktm lograron no solo el triunfo sino que situarse en ese lugar de privilegio de ser los nuevos referentes en moto ya que luego del retiro de Marc Coma y Cyril Despres, quienes se repartieron los triunfos por mas de una década, ahora viene el momento de la nueva generación, donde Price pegó primero y busca la consolidación. No sera fácil ya que el eslovaco Stefan Svitko, tres veces campeón europeo de enduro y con siete dakar disputados, buscará su primer triunfo. Sudamérica está muy bien representada de la mano del chileno Pablo Quintanilla, este piloto tomó la posta que dejaron sus antecesores Carlo De Gavardo y Francisco Chaleco Lopez y buscará mejorar su tercer lugar del año pasado. Viene de un año de mucho trabajo y llega bien preparado, ya que se consagró este año campeón mundial de FIM Cross Country. EL portugues Helder Rodriguez lidera la formación de Yamaha, Ricky Brabec con la Honda y el español experimentado Juan Pedrero Garcia (ex mochilero de Coma) con la Sherko, esperan dar batalla.
Cabe destacar a la española Laia Sanz, top ten en el 2015, que espera mejorar su palmarés. La baja más importante la dio el argentino Kevin Benavidez de gran tarea el año anterior quien sufrió una caída entrenando para el Dakar y no será de la partida por una fractura de la muñeca derecha.
Sonik y Casale van por la revancha en los Cuadriciclos
Sin la presencia de los hermanos Patronelli, la categoría cuadriciclos tiene un total de 37 anotados donde se destacan el polaco Rafal Sonik y el chileno Ignacio Casale, ambos con Raptor 700 Yamaha, quienes llegan con mucha sed de victoria. Ambos buscarán repetir el triunfo, ya que Casale se quedó con la carrera en el año 2014 y Sonik en el 2015. Josef Machacek el ganador de la primera edición en Sudamerica también se presenta con grandes chances y esta listo para pelear la punta.
Iveco Kamaz y Tatra salen a buscar el exito en los camiones
El holandes Gerard De Rooy, uno de los mas experimentados en esta división, será el encargado de abrir la marcha ya que se impuso con su Iveco el año pasado, y lidera la escuderia que tiene a Ton van Genugten y al argentino Federico Villagra en sus filas para salir a buscar la victoria. Villagra se adaptó muy bien al Iveco llegando a liderar por un día en su primera participación en la anterior edición. Airat Mardeev con el poderoso Kamaz buscará volver a poner a la marca en lo más alto liderando una de las marcas mas ganadoras de esta carrera en su historia, y que tiene también como escudero al ruso Eduard Nikolaev. Por su parte el checo Ales Loprais es la carta ganadora de Tatra mientras que Hans Stacey con el Man buscará arrimar lo más que se pueda, en una categoría cada vez mas competitiva.
Autos: Peugeot Toyota y Mini listos para dar espectáculo
Peugeot presenta una ofensiva importante con cuatro modelos 3008 DKR, teniendo entre sus pilotos a cuatro íconos de la actividad. El grupo lo lidera el hombre record de la carrera, el frances Stephane Peterhansel, último ganador de la prueba y quien abrirá la marcha con el número 300. Peterhansel es un conocedor de la carrera la ha ganado en doce oportunidades y le vale su apodo ¨Monsieur Dakar¨. Seis veces en moto y seis en autos lo situan como el hombre record y por ende el más experimentado, piloto completo que sabe esperar la carrera y que le ha dado a Peugeot el primer triunfo de los nuevos modelos DKR.
A su lado mucho tuvo que ver en el desarrollo de la unidad otro experimentado y gran tester, el español Carlos Sainz. El madrileño bi campeón mundial de rally con 54 años llega con gran entusiasmo buscando su segundo triunfo en la prueba, ya que abandonó el año pasado cuando peleaba la punta.
El múltiple campeón de rally Sebastien Loeb fue la gran revelación el año pasado liderando la prueba y ganando etapas en su primer participación, aunque varios errores lo despojaron de ganar, pero indudablemente Loeb va rápido en todo lo que se propone y también es gran candidato. Junto a ellos el ex motociclista Cyril Despres completa el cuarteto de la marca del león que se presentan como los grandes candidatos.
Toyota a través del Toyota Gazoo Racing no se queda atrás y después de trabajar todo el año en la puesta a punto de la Hilux prometen pelear por la victoria y para ello cuentan con tres grandes experimentados en esta prueba que conocen las mieles del triunfo. El Qatari Nasser AL Attiyah ganador en dos oportunidades lidera el grupo, junto al español Nani Roma vencedor en el 2014 y al sudafricano Giniel de Villiers primer ganador en sudamerica.
La llegada al equipo de los ex pilotos de Mini Al Attiyah y Roma llenó de optimismo a la marca japonesa y tras mucho trabajo en el desarrollo de la unidad esperan poder darle batalla de igual a igual a los Peugeot.
Por su parte Mini buscará volver a ser protagonista. El X Raid Team presenta una flota importante de Mini Cooper y tiene entre sus principales volantes a otro que llega del mundo del rally a medirse en el raid, el finlandes Mikko Hirvonen, de buena tarea el año anterior adaptandose al auto y a la prueba ubicandose cuarto y siendo el mejor Mini en esa oportunidad. Lo secundan en el equipo El saudí Yazeed Al Rajhi y el argentino Orlando Terranova.
El español Xavier Pons con la Ford Ranger del South Racing y los argentinos Emiliano Spataro y Facundo Ardusso con la Renault Duster buscaran ser protagonistas.