La visita al Texas Motor Speedway deparó a Daniel Suárez la quinta posición, que le permitió quedarse en solitario en el liderato de la "Ronda de Ocho" del Chase de la NASCAR Xfinity Series, que concluirá la próxima semana en Phoenix.
En la segunda de tres pruebas que integran esta ronda de ocho pilotos, de la que sólo cuatro avanzan a la gran final en Homestead, programada para el 19 de noviembre, el mexicano tuvo una actuación bastante sobria, sin poner una llanta fuera de lugar, y siempre negociando hacia el objetivo que es lograr la mejor posición posible.
Durante las 200 vueltas pactadas al óvalo de 1.5 millas (2.41 kilómetros), el regiomontano se mantuvo de manera consistente en el top-10, con cierta cautela por problemas eléctricos, y no fue sino hasta la última parte cuando echó toda la carne al asador y logró meterse hasta la quinta plaza.
El resultado de este sábado colocan a Suárez en la cima con 3 mil 75 puntos, apenas uno por encima de Elliott Sadler, quien llegó justo detrás del mexicano, en la sexta posición. La victoria fue para Kyle Larson, seguido por Brad Keselowski, quien había dominado gran parte de la competencia, y Kevin Harvick, todos ellos pilotos estelares de la NASCAR estadounidense, la Copa Sprint.
Ahora sólo resta la definición de esta fase la próxima semana en el óvalo de Phoenix, para dar paso a la gran final en Homestead con los cuatro mejores pilotos de la temporada.
Daniel Suárez:
“Poco antes de la mitad de la carrera tuve un problema con la batería; sé que tengo una segunda batería, pero no sabíamos qué tanto nos iba a aguantar. Tratamos de seguir manejando igual y de controlar el desgaste de los neumáticos. Por suerte fue un día fresco y la temperatura no fue factor. Estoy contento con el resultado… Creo que estamos en una buena posición, la palabra comodidad no se puede usar, estamos en ventaja respecto a los otros siete pilotos, pero eso no significa que algo esté escrito”.