Nos pusimos detrás del volante de la segunda generación del Audi A1, un vehículo que aunque compacto, no sacrifica un ápice el lujo y calidad que caracterizan a un vehículo de la firma alemana.
Es cerca del mediodía en las calles de la capital poblana y el intenso calor no da tregua, y a pesar de ello, nuestros ánimos no están en lo más mínimo afectados. Buena parte de que eso así sea es que frente a nosotros tenemos la segunda generación del A1, el vehículo compacto que representa la puerta de entrada a la familia de los cuatro aros.
Antes de acomodarnos en el asiento del conductor para disfrutar del aire acondicionado, nos damos el tiempo para inspeccionar toda la carrocería. El trabajo que consiguieron los diseñadores es espectacular, más afilado y más deportivo que su predecesor, sobre todo el Audi A1 con el acabado S-Line que estamos a punto de probar vestido en este color azul que resalta cada detalle exterior.
La parte frontal destaca no sólo por la enorme parrilla Single Frame que le da un aspectos mucho más agresivo que el auto de salida, si no por las generosas tomas de aire simuladas en los extremos inferiores de la fascia y por las tres rendijas ubicadas en el borde del cofre, heredadas del Audi Quattro de 1984, como un homenaje al pasado.
Una vez en el interior, el habitáculo ofrece un tablero de un aspecto moderno en el que resalta el sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil a color de 8.8 pulgadas, que ofrece navegación, conectividad Apple CarPlay y Android Auto y un equipo de sonido premium Bang & Olufsen 3D con 11 bocinas.
Presionamos el botón de encendido y el motor de cuatro cilindros 2.0 litros turbocargado cobra vida con un bramido que emana por los tubos de escape, proporcional al tamaño de nuestra sonrisa y que nos anuncia que se trata de algo serio. Los primeros kilómetros los realizamos con el modo de manejo Efficiency, el cual mantiene al propulsor trabajando relajadamente por debajo de las dos mil rpm gracias a la acción de la transmisión S Tronic de seis velocidades.
No necesitamos más para enfrentar el poco tránsito que, debido al COVID-19, está presente en las calles, sin embargo, no podemos negar que se percibe un conjunto con una clara orientación hacia la deportividad, pues la rigidez de la suspensión es mayor, así como la dureza de la dirección.
Pero qué más da, es un auto hecho para devorar kilómetros con rapidez, así que nos incorporamos a la autopista México-Puebla para que este pequeño misil de bolsillo estire las piernas, así que cambiamos al modo Dynamic, el cual no sólo libera todo el potencial del motor y los 200 caballos de fuerza que produce, sino que además, endurece aún más el volante y la suspensión.
Presionamos con decisión el acelerador y obtenemos lo que esperábamos de este paquete S-Line y que nunca nos ha defraudado: una respuesta contundente del motor cuyo retraso en la respuesta del turbo apenas y se percibe. Cada cambio de velocidad va aderezado con un petardeo glorioso que sale del escape y que alimenta nuestros sentidos, conforme la aguja del velocímetro se acerca con rapidez a los 200 km/h.
La plataforma MQB A0 sobre la que el nuevo Audi A1 está montado no sólo le ha agregado mayor rigidez estructural y ha reducido el peso del coche, sino que, además, le permitió crecer para ofrecer más espacio en el habitáculo y una mayor estabilidad, gracias a que es 5.6 centímetros más largo y con una distancia entre ejes 9.4 centímetros mayor que el A1 anterior.
Ahora bien, si eres de los que no desean un verdadero misil tierra-tierra, se puede optar por alguna de las otras tres versiones restantes del catálogo (Urban, Cool y Ego) equipadas con mecánicas menos deportivas, aunque no por ello menos emocionales, pero definitivamente, la variante S-Line es la que mejor equilibrio entre un auto deportivo y uno de uso diario ofrece; los precios arrancan en $399,900 y terminan en $549,900 para el S-Line.
AUDI A1 S-LINE 2020
MOTOR: L4 2.0 litros turbo
POTENCIA HP: 200
TORQUE LIBRAS-PIE: 236
TRACCIÓN: Delantera.
TRANSMISIÓN: Automática S Tronic de 6 velocidades con modo manual
CONSUMO COMBINADO: 15.8 km/l.
VEL. MÁXIMA: 235 km/h.
NUMERALIA
335
LITROS
es el volumen disponible en la cajuela de este compacto alemán
1,335
KILOGRAMOS
es el peso que el Audi A1 S-Line registra en la báscula
6.5
SEGUNDOS
es el tiempo que le toma acelerar de cero a 100 km/h
15.8
KM/L
es el consumo de combustible combinado que declara la ficha técnica