No deja de evolucionar. A 25 años de haberse presentado en sociedad, Honda CR-V no ha dejado de mejorar en todos los aspectos y ahora el modelo 2020 llega a México presumiendo un merecido lavado de cara que la hace todavía más atractiva en su quinta generación.
Salimos al estado de Morelos a conocer los atributos de esta Honda CR-V que el año pasado vendió en México 19,069 unidades ejemplares, siendo la camioneta más comercializada en territorio nacional y vaya que si las sorpresas fueron gratas.
Antes de tomar carretera nos dimos tiempo para echarle un vistazo 360º a esta CR-V que muestra una clara evolución respecto al modelo 2019 sobre todo en la parrilla frontal que ahora combina de gran manera el cromo con elementos en negro brillante que le dan a esta camioneta ensamblada en Ohio, Estados Unidos, un aspecto más refinado y robusto.
Como novedad encontramos las luces de niebla compuestas ahora de cinco pequeños cubos. Los juegos ópticos en Full LED se complementan con unas formas más estilizadas y que van muy bien con el resto del conjunto.
Los laterales también echan mano de cromo y en general se muestran líneas limpias y fluidas. Vemos en ese perfil un nuevo diseño de rines, los cuales son de 18 pulgadas.
MOTORIZACIÓN
Tras surcar un tráfico denso hacia el sur de la ciudad de México por fin tomamos carretera y fue ahí donde pusimos a prueba las capacidades del motor que monta esta CR-V enfilándonos hacia Cuernavaca.
Quien ha recorrido la autopista sabe que las orografía y el trazado del asfalto representa siempre un reto para cualquier vehículo, es ahí donde le damos un especial reconocimiento al motor 4 cilindros 1.5 litros turbo, pues cuando pisamos el acelerador a fondo para exprimir al máximo los 188 caballos de fuerza con los que está vitaminado este propulsor, CR-V se comportó a la altura.
Dicho motor está acoplado a una transmisión CVT que empuja al eje delantero y además agrega la tecnología Earth Dreams y el sistema Eco Assist para una optimización en el rendimiento de combustible.
Una de las claves del éxito de CR-V es su gran calidad de marcha y el modelo 2020 cumple a cabalidad con ese cometido, pues el manejo es excelso, con una dirección suave y precisa. El manejo es sublime.
Tras una parada para en la ciudad de la eterna primavera para refrescarnos, cedimos el volante y al ocupar el asiento del copiloto pudimos apreciar los acabados de esta CR-V que lo mismo combina acabados tipo madera que detalles en cromo y piano black.
Otro de los puntos fuertes de CR-V es su extraordinario espacio interior y la forma en la que Honda ha repartido compartimentos y otros aditamentos para lograr una sumamente atractiva atmósfera interior.
Tras compartir unas fotos en las redes sociales de Puesta a Punto, nuestro teléfono comenzó a demandar conectarse para recargar la batería. Nos preocupamos durante unos segundos hasta que vimos gratamente que este facelift de CR-V incorpora debajo del tablero central cargador inalámbrico para smartphones, así que solventamos el problema rápidamente, pero si tú no olvidas el cable en la maleta, dispones en el panel central de dos puertos USB que cargan rápidamente.
Para smartphones CR-V dispone de conexión a través de Apple CarPlay y AndroidAuto y se pueden desplegar algunas aplicaciones de los mismos en la pantalla central que es táctil y a color.
¡Prueba superada! Tras ir y volver de Cuernavaca nos queda claro que Honda CR-V escala al siguiente nivel. Un nivel de sofisticación y refinamiento con los que nos queda claro que su reinado va para largo.
VERSIONES Y PRECIOS:
Turbo: $489,900
Turbo Plus: $539,900
Touring: $589,900